Los bomberos del condado de Schuylkill se reúnen para el desfile de la convención

26 de agosto—CRESSONA — A lo grande, los bomberos de todo el condado de Schuylkill dieron lo mejor de sí el sábado en el 69º desfile de la Convención de Bomberos Voluntarios del condado de Schuylkill.

Ataviados con trajes azules, marchando al ritmo de los gaiteros y conduciendo camiones de bomberos construidos cuando Harry S. Truman era presidente, decenas de bomberos se ganaron la admiración de miles de personas reunidas a lo largo de una ruta de desfile de 1,7 millas a través de secciones de Schuylkill Haven y Cressona.

Por muy impresionantes que fueran los brillantes camiones cargados de cromo, fueron las palabras de JoAnn Gerber, de 78 años, las que capturaron la esencia de la ocasión.

"Este desfile muestra el orgullo y la dedicación de los hombres y mujeres del servicio de bomberos", dijo Gerber, quien observó el desfile con su esposo Carl, de 83 años, en el cruce de las calles Silliman y Pottsville en Cressona. "Se necesita un tipo especial de persona para donar su tiempo para ayudar a otras personas, y eso me toca el corazón".

Gerber añadió: "Todos podemos irnos a la cama por la noche sabiendo que habrá alguien allí en caso de emergencia".

Tras cuatro años de preparación, el desfile concluyó una serie de eventos de convención de una semana de duración que comenzaron el 20 de agosto con un servicio en memoria de tres hombres que demostraron la esencia de lo que significa ser un bombero voluntario: Robert "Boat" Peel, pasado jefe de Liberty Fire Company No. 4 en Schuylkill Haven; Robert "Bobby" Berger, ex jefe de bomberos de Cressona; y Herbert "Herbie" Berger, un bombero de Harrisburg cuyas raíces estaban en Liberty Fire.

Miembros de las familias de los homenajeados viajaron en vehículos en la primera división del desfile.

Bajo el tema "Mejor juntos: dos casas, una familia", la convención fue organizada conjuntamente por Good Will Hose Company en Cressona y Liberty Fire Company en Schuylkill Haven.

Los jefes de bomberos de ambos condados, Michael Pontician de Cressona y Mike Donati de Schuylkill Haven, viajaron en un vehículo al frente del desfile.

Pontician y Leroy Boyer, tesorero de Liberty Fire Company, copresidieron la convención.

Orgullosa herencia

La amplitud del servicio de bomberos voluntarios del condado de Schuylkill fue evidente cuando aproximadamente 230 camiones de bomberos y otros aparatos se alinearon en varias cuadras alrededor de la Primera Iglesia Metodista Unida en Schuylkill Haven el sábado, esperando la llamada para comenzar el desfile.

Los espectadores se sintieron atraídos instantáneamente por el distintivo globo de vacío cromado en la parte delantera de la bomba Ahrens Fox de 1928 perteneciente a West End Hose Company No. 7 en Pottsville.

Aunque ya no se utiliza en incendios, el conductor Dan Kelly dijo que el camión de 95 años todavía está operativo y puede bombear 700 galones por minuto.

Bryan Neifert compartió el secreto de conducir el camión de bomberos Chevy 1946 del Departamento de Bomberos Comunitario No. 1 en New Ringgold.

"Hay que hacer doble embrague", dijo Neifert, cuyo hermano Chad conducía el antiguo camión de bomberos Seagrave de 1973 de la compañía.

"En eventos como este, puedes ver nuevos aparatos contra incendios y viejos amigos", dijo Bryan Neifert. "Es como una familia".

Tony Kaledas III, de 29 años, que ha sido bombero desde los 14 años en la Compañía de Bomberos N° 1 de Friedensburg, admite que lleva la lucha contra incendios en la sangre.

Su padre, Tony Kaledas Jr., es bombero. Y su madre, Ann, fue quizás la primera mujer bombero en el condado de Schuylkill.

"Es un buen día para los bomberos", dijo Kaledas, de pie cerca del camión de bomberos Pierce 2020 de Friedensburg. "Hoy han realizado un buen evento aquí".

Gran espectáculo

Andrea Wenger y su hijo Jake, de 13 años, lograron encontrar un lugar con sombra para ver el desfile frente a la Cressona American Legion.

Jake espera ansiosamente el próximo año, cuando sea elegible para convertirse en bombero junior y unirse a su padre, Ed Wenger, en Wiconisco Fire Company.

"Está listo", dijo Andrea. "No puede esperar para ayudar y aprender".

Los Wenger estaban entre los miles de personas a lo largo de la ruta del desfile, que serpenteaba desde Schuylkill Haven hasta Cressona y concluyó en la planta de Hydro-North American Extrusions.

Unos minutos después de la 1 de la tarde, sonó la sirena de Good Will Hose Company para iniciar el desfile. La primera división tardó aproximadamente una hora en llegar al estrado del juez frente a la estación de bomberos de Good Will.

Phil Groody, jefe de bomberos de Ashland, anunció las unidades en marcha desde el estrado del juez.

La escolta de Robert E. Baker American Legion Post 38 en Schuylkill Haven estuvo entre las primeras unidades, seguida por las mujeres de los puestos auxiliares de Cressona y Schuylkill Haven American Legion.

En una impresionante muestra de unidad, los bomberos y mujeres del departamento de bomberos de Schuylkill Haven se tomaron de la mano al pasar por el estrado del juez. Fueron seguidos por un camión de Liberty Fire Company construido por KME Fire Apparatus, anteriormente de Nesquehoning, condado de Carbon.

La unidad uniformada que marchaba de la Compañía de Rescate y Bomberos de West End en la ciudad de Mahanoy estuvo acompañada por Breslin, la mascota dálmata de la unidad.

Michael J. Kitsock, presidente de la Sociedad Histórica de Bomberos de Schuylkill, conducía un camión de bomberos Mack blanco de 1950 de West End Fire and Rescue Company.

Norbert Moyer, de 89 años, el miembro de mayor edad de Good Will, observó todo el desfile desde una silla de jardín junto a la compañía de bomberos.

Uno de 12 hijos, había crecido frente a la compañía de bomberos. Supervisor jubilado de edificios y terrenos en la planta de Alcoa Aluminium detrás de la compañía de bomberos, ha tenido una conexión de toda la vida con Cressona.

"Este es un gran día para Cressona", dijo Moyer, que ahora vive en Friedensburg.

Marie McDonald, que vive frente a la estación Good Will, decoró su porche con pancartas que decían "Bienvenidos bomberos" y banderas estadounidenses.

Su marido, Marty McDonald, es conductor en Good Will. Marie es muy consciente de los sacrificios que hacen los bomberos voluntarios.

Aún así, tiene la esperanza de que los jóvenes se presenten y tomen la responsabilidad para garantizar la continuidad de las compañías de bomberos voluntarios.

"Necesitamos muchos más", dijo. "Hay tanta escasez".

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